martes, 7 de abril de 2015

LAS RENUNCIAS DE MAMÁ



Hace unos días, mientras curioseaba por mi Facebook, me topé con un enlace bastante interesante sobre las renuncias que implica la maternidad.

Nunca me he significado por abanderar causas perdidas, ni mucho menos con implicaciones de tinte feminista (soy totalmente contraria a etiquetas en cuanto a género se refiere) pero este artículo en concreto, me dio mucho que pensar.


En él su autora, Nohemí Hervada, con bastante experiencia como Mami  y también como Blogger , exponía sus sensaciones y sentimientos ante la situación en la que nos encontramos y encontraremos todas, la renuncia a algo en nuestras vidas en el momento en que nos convertimos en Madre.


Quién no renuncia a su carrera acaba renunciando a tiempo con sus hijos, por desgracia el día tiene 24 horas y lo vivimos como tal, la mayoría robándonos horas de sueño para conseguir llegar a todo.


La mayoría de nosotras volvemos a trabajar, tras la baja de maternidad, con el corazón destrozado, nuestra sensación de perdernos lo mejor de nuestros hijos nos destroza. Bien,  también podemos quedarnos con ellos, si nuestra situación económica lo permite.


Vale, estamos en casa, hemos renunciado a todo por disfrutar de nuestros peques (vamos a pensar que de forma egoísta, porque no nos queremos perder esta etapa, logística aparte), es inevitable sentir la desazón por no tener una vida propia, me explico, un espacio para una misma. 


Siempre digo que somos la generación engañada. Desde muy niñas nos han educado para ser profesionales independientes, preparadas, triunfadoras, de modo que nuestro "espacio para nosotras mismas" se ha visto ligado a nuestra carrera laboral, pero ahí el gran engaño, nadie nos dijo que, cuando quisiéramos formar una familia, el castillo de naipes se derrumbaría.


Sobre el tema de la conciliación, necesitaría unos cuantos post, por capítulos y no acabaríamos.


Y en cuanto al papel de los Papás en todo esto (daría también para unos cuantos tomos), por muy buenos padres que sean, por mucha implicación que tengan en la educación y crianza de sus hijos, no nos engañemos, están educados y programados para ser profesionales exitosos, no para cuidar de sus hijos a tiempo completo (algunos diría que ni a tiempo parcial).


El artículo de Nohemí me encanta porque no habla de situaciones, ni de leyes, ni de planes de conciliación, sino de SENTIMIENTOS, que son los que con demasiada frecuencia solemos descuidar, de sensaciones, de miedos, de alegrías y de frustraciones, poniendo en palabras lo que mayoría de nosotras siente o ha sentido en algún momento de nuestra aventura como Mamis.


Os dejo el enlace, un artículo para guardar.


http://nohemi-hervada.com/las-renuncias-de-las-madres/


Feliz vuelta a la rutina, Mamágicas!


p.s. Si os sirve de ejemplo, estoy escribiendo el post con un Bichillo de 10 meses sobre mis rodillas, intentando sabotearlo con sus golpes de teclado, glup!

3 comentarios:

  1. Una entrada genial que da para mucho , muchisimo, muchisimo!!!!!!!!!! sin duda alguna somos la generación engañada, y es cierto que todas renunciamos a algo de alguna forma, yo prefiero pensar que he adaptado mi forma de vida a mis hijas, que a cambio de mis suepr madrugones y de un trabajo normalito puedo estar con ellas por las tardes, eso sí me da mucha pena no verlas nuncas por las mañanas, solo los fies de semana......he adaptado mi forma de vida a ellas y de momento no lo cambio por nada, pero sin duda alguna los hombres pocas adaptaciones hacen ni de su vida privada ni familiar......pero ellos se lo pierden!!!!!!!!!!! Muchos besos!!!!! Carol

    ResponderEliminar
  2. Me suento totalmente identificada con el concepto Generación engañada!!! Muy buen post el tuyo y el de Nohemi!!!!

    ResponderEliminar
  3. Me suento totalmente identificada con el concepto Generación engañada!!! Muy buen post el tuyo y el de Nohemi!!!!

    ResponderEliminar